Lourdes Barragán. Informe
del seminario/taller “Pueblos indígenas y áreas protegidas en América latina”.
Programa FAO/OAPN Fortalecimiento del manejo sostenible de los recursos
naturales en las áreas protegidas de América Latina. Santiago de Chile, 2007,
45 páginas. Foro Electrónico “Pueblos Indígenas y Áreas Protegidas en América
Latina”.
El documento da cuenta de los antecedentes y actividades del
evento que da nombre al estudio, realizado en San Martín de los Andes, Parque
Nacional Lanin, (Argentina) en el 2007. El foro electrónico tuvo como propósito
principal conocer y analizar las experiencias de los países de América Latina y
El Caribe respecto al manejo de áreas protegidas con presencia de comunidades
indígenas. El debate se organizó alrededor de tres temas principales: los avances
y limitaciones de las políticas y normativas concernientes; las lecciones
aprendidas sobre manejo y administración de áreas protegidas por parte de los pueblos
indígenas; y los retos para la conservación de la biodiversidad en el marco del
reconocimiento de los derechos indígenas. El Intercambio de conocimientos permitió
elaborar recomendaciones sobre políticas y acciones para enfrentar los desafíos
regionales sobre el tema.
De la lectura se deduce que son cada vez mayores las
iniciativas de los pueblos indígenas orientadas a crear, en sus territorios,
áreas con diversos grados de protección, que incluyen propuestas para que sean
incorporados en los sistemas nacionales de áreas protegidas. También que prima el
intercambio de experiencias y ayuda mutua en temas como la demarcación
territorial, la geo-referenciación y las estrategias de conservación, en la
consolidación de “corredores” ecológico-culturales transfronterizos
sobrepuestos a territorios indígenas. Y por último que no se observan avances significativos
en las políticas estatales. De vital importancia fue la discusión sobre los Pueblos
indígenas en aislamiento y/o en contacto inicial, pues la mayoría de sus
territorios ancestrales son actualmente declarados como áreas protegidas, los
cuales colindan entre países de América del Sur, y su sobrevivencia se encuentra
seriamente amenazada.
En términos generales, la revisión de situaciones
específicas revela una tendencia de los sistemas nacionales de áreas protegidas
hacia la inaplicación de los derechos indígenas, no obstante el avance de su reconocimiento
en los sistemas jurídicos de todos los países. Esto es de especial relevancia,
dado que las presiones y amenazas externas que se ciernen sobre las áreas
protegidas, por lo general superpuestas sobre territorios indígenas, ponen en
peligro los objetivos de conservación de estos espacios y la sobrevivencia
misma de los pueblos indígenas.
La superposición de áreas protegidas sobre territorios
indígenas ha sido una fuente de conflictos que los Estados han enfrentado de
diversas maneras. Algunos desarrollaron modelos de interlocución que han pasado
de la relación subordinada a convenios de uso de los espacios y de los recursos
naturales. Otras caminan por diversas experiencias de cogestión y
coadministración, con distintos niveles de participación de los pueblos
indígenas en la toma de decisiones y gestión de las áreas protegidas.
Uno de los temas más importantes ha sido la creciente
concientización de que la conservación es un instrumento de mutuo beneficio. Hoy
es posible hablar de una alianza entre las instituciones encargadas de las
áreas protegidas y las organizaciones indígenas, con enormes posibilidades a
largo plazo, debido a que los objetivos de conservación de la biodiversidad y
de los ecosistemas se corresponden en gran medida, no obstante las diferencias
conceptuales, con las prácticas tradicionales de los pueblos indígenas. Esto ha
permitido enfrentar amenazas comunes (extracción de recursos naturales, explotación
indiscriminada del bosque, ocupación territorial por terceros, entre otras). Otro
aspecto de suma importancia es el avance en las políticas estatales para
integrar los territorios indígenas y las AP colindantes
o transfronterizas, mediante acuerdos bi o trinacionales, aunque se
requiere fortalecer los esfuerzos para facilitar el movimiento de las comunidades
de un mismo pueblo, entre ambos países.
El problema más crítico identificado es el desconocimiento
estatal sobre la autoridad de los pueblos indígenas y la propiedad sobre sus
territorios ancestrales superpuestos por áreas protegidas. Esto se debe fundamentalmente
a la falta de voluntad política estatal y a la débil o ausencia de
procedimientos y mecanismos claros para regular la participación de los pueblos
indígenas en la toma de decisiones sobre dichas AP o sus zonas adyacentes. La “participación
social” no se ha adecuado a sus especificidades culturales y formas
organizativas, imposibilitado la representación legítima y efectiva, esto
incluye la falta de claridad para delimitar las competencias de las partes en
la gestión compartida de las AP.
Finalmente el seminario formulo una serie de recomendaciones
de enorme relevancia en torno a líneas políticas y acciones para mejorar la
gestión de áreas protegidas con participación de los Pueblos Indígenas: 1) Sobreposición de áreas protegidas en tierras
y territorios indígenas; 2) Territorios
indígenas conservados; 3) áreas
protegidas y territorios indígenas transfronterizos; 4) ordenamiento del territorio; planes de
manejo y planes de vida; 6) gestión
integrada; 7) organismos de
integración regional; 7) fortalecimiento
de capacidades.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario